«He aquí un caleidoscopio de voces corales reviviendo, compañeras de la palabra y de la imagen, las viúdas de los vivos y muertos junto con los despojos / de la mano opresora o la persistente cartografía geográfica castellana que obliga a repetir la historia de amos y esclavos. He aquí un nuevo presente poético reparador para el encuentro amoroso, la tintada del siempre oxigenante humor y el viaje cultural internacionalizador. Aquí una auténtica constelación poética que multiplicador ramo de flores parece en que la copla popular cede el paso al solemne soneto y el octosílabo rimado al versolibrismo experimental y a la prosa poética.»

(Mercedes Queixas Zas)